Brock Turner no puede sacudirse su pasado de encima tan fácilmente como esperaba

Empiezo el día celebrando la noticia de que un tribunal de apelaciones de San Francisco ha fallado en contra de la solicitud de Brock Turner de tener un nuevo juicio confirmando así su condena por agresión sexual. El cabreo de que le cayesen sólo seis meses no me lo quita nadie, pero esta sentencia confirma que es un violador, que tiene que estar registrado como tal y que su nombre va a seguir asociado con la agresión sexual de por vida.

“Si no puede seguir estudiando, si no encuentra trabajo, si no le sale pareja… que se lo hubiera pensado antes”.

Entrecomillado y dicho con la boca pequeña porque hay y seguirá habiendo universidades que se pasen por el forro los derechos de sus estudiantes, empresas dispuestas a contratar a un santo varón injustamente acusado y condenado y mujeres gilipollas que piensen que lo que hizo o no es tan grave o son inventos de la víctima.