Acabáramos

Estoy ayudando a una amiga a escribir un par de párrafos para incorporarlos a su perfil en match.com. Me ha dado una lista de requisitos: que trabaje, que sea independiente, que sea familiar pero no viva con sus padres y no llame a la madre cuatro veces al día, que no sea una alcohólica ni tenga problemas mentales graves, que sea femenina, que se maquille pero no mucho, que sea normal… Acabáramos, que diría mi amigo Jorge. Hasta aquí todo iba la mar de bien. Emocionada estaba yo haciendo una señal al lado de cada requisito hasta que he leído “normal” y me he cagado.

¿Que es “normal” para una americana? porque yo muy normal no estoy pero aquí me perdonan cosas que en España serian motivo de vergüenza como ir a trabajar en pijama o escuchar a la Jurado mientras trabajo o cantar la canción de los Fraggel a mis 26 años (en español e inglés que de algo tienen que servirme estos cuatro años en EEUU).

¿Qué es normal? le pregunto clavando mi pupila en su pupila marrón. Normal no soy yo, porque además la niña quiere una lesbiana de nacimiento y no una loca feminista, radical, separatista, lesbiana de vocación como yo. ¡Anda que no pide ná mi niña!