Cuestión de ovarios
El relaciones públicas de Manuel Fraga tiene que ponerse atómico cada vez que su cliente tiene un periodista cerca porque es abrir Fraga la boca y subir el pan. No hay más que darse una vuelta por internet para darse cuenta de las perlas que ha dejado este hombre a su paso...
Sobre el índice de natalidad.... "una mujer antes de casarse procura tener su piso, por si acaso, y su coche, y cuando se da cuenta tiene el primer hijo a los 30 o 32 años, muchas veces por cesárea, lo que hace difícil repetir después". Hay que ver como somos ¿eh? lo malas que somos algunas que antes de ponernos a parir como conejas (como su señora madre que había parido 11 criaturas con 31 años) nos da el capricho de estudiar, viajar, acabar una carrera, establecernos en nuestras empresas, seleccionar y ver con quien nos casamos, montar piso, comprarnos el coche y después tener hijos... Lo de que la cesárea complique el asunto se lo tendría que preguntar a un ginecólogo porque tengo compañeras de trabajo que van por el tercer niño con cesárea y sin problemas.
Sobre las encuestas... "Siempre me ha parecido que esos estudios tienen un gran interés pero tienen sus limitaciones. Y evidentemente, pues si a una mujer le preguntan con cuántos hombres se acuesta no suele dar una respuesta absolutamente certera". Digo yo, que para hablar de las encuestas también podía haber echado mano del caso de los donjuanes que se comen una y cuentan veinte.
Sobre los homosexuales... "si nacen así, pues que se le va a hacer, pero que no digan encima que se ponen orgullosos de funcionar al revés". Pues yo a él le digo lo mismo: si nació así o se cayó de la cuna al nacer, que vamos a hacerle. Pero manda huevos que se metiera en política y manda huevos que lo hayamos tenido en activo la tira de años soltando las burradas que suelta por la boca. Coño con los gallegos y coño con los del PP - unos por votarlo y otros por mantenerlo en el partido ¿no lo pueden arrinconar en un despacho?
Por internet corren bromas sobre lo protestonas que estamos las mujeres (socialistas o peperas, para esto se ve que somos "la misma mierda") y comentarios en plan "a ver si ahora no va a poder hablar uno". Pues no, no bonito de cara. Para soltar cosas como las de arriba mejor te quedas callado. No se puede hablar alegremente. No se puede decir lo primero que le venga a la cabeza. No se puede ir por la vida comparando a las mujeres con jacas (Domingo Triguero) o mongolitas (Carmelo Vega). No se puede ir por la vida implicando que somos todas unas putas solo que sin cobrar y discretas (Fraga, por cierto, ¿qué quiso decir Bono con los besos y los mordiscos?). No se puede. Ya no.
A Fraga, Triguero, Vega y Bono les ha pasado lo que a mi abuelo: que no han sabido adaptarse a los tiempos. Que no terminan de enterarse que la España de la pandereta donde a una mujer se le podían soltar autenticas burradas (véanse películas de glorias nacionales repetidas hasta la saciedad en Cine de Barrio) sin llevarse una hostia hace mucho, pero mucho tiempo que ha dejado de existir. No terminan de entender que cada vez quedan menos hombres que les rían la gracia (abiertamente, por supuesto - ese es otro tema) y no se han percatado de que las mujeres estamos más respondonas que nunca. No, no es atentar contra la libertad de expresión. Es simplemente darle una vuelta a la tortilla y que a partir de ahora sean los hombres los que tengan que pensar dos veces antes de abrir la boca, que midan sus palabras, que aprendan lo que es el miedo al rechazo social, a hacer el ridículo, que sientan la presión de sus compañeras de clase, de sus parejas, y de la opinión publica... que aprendan que no están solos en el planeta y que no vamos a dejar que sigan haciendo lo que les salga de los cojones. Que se den cuenta de que el mundo ha dejado de girar en torno a sus huevos y ahora gira en torno a nuestros ovarios.
Sobre el índice de natalidad.... "una mujer antes de casarse procura tener su piso, por si acaso, y su coche, y cuando se da cuenta tiene el primer hijo a los 30 o 32 años, muchas veces por cesárea, lo que hace difícil repetir después". Hay que ver como somos ¿eh? lo malas que somos algunas que antes de ponernos a parir como conejas (como su señora madre que había parido 11 criaturas con 31 años) nos da el capricho de estudiar, viajar, acabar una carrera, establecernos en nuestras empresas, seleccionar y ver con quien nos casamos, montar piso, comprarnos el coche y después tener hijos... Lo de que la cesárea complique el asunto se lo tendría que preguntar a un ginecólogo porque tengo compañeras de trabajo que van por el tercer niño con cesárea y sin problemas.
Sobre las encuestas... "Siempre me ha parecido que esos estudios tienen un gran interés pero tienen sus limitaciones. Y evidentemente, pues si a una mujer le preguntan con cuántos hombres se acuesta no suele dar una respuesta absolutamente certera". Digo yo, que para hablar de las encuestas también podía haber echado mano del caso de los donjuanes que se comen una y cuentan veinte.
Sobre los homosexuales... "si nacen así, pues que se le va a hacer, pero que no digan encima que se ponen orgullosos de funcionar al revés". Pues yo a él le digo lo mismo: si nació así o se cayó de la cuna al nacer, que vamos a hacerle. Pero manda huevos que se metiera en política y manda huevos que lo hayamos tenido en activo la tira de años soltando las burradas que suelta por la boca. Coño con los gallegos y coño con los del PP - unos por votarlo y otros por mantenerlo en el partido ¿no lo pueden arrinconar en un despacho?
Por internet corren bromas sobre lo protestonas que estamos las mujeres (socialistas o peperas, para esto se ve que somos "la misma mierda") y comentarios en plan "a ver si ahora no va a poder hablar uno". Pues no, no bonito de cara. Para soltar cosas como las de arriba mejor te quedas callado. No se puede hablar alegremente. No se puede decir lo primero que le venga a la cabeza. No se puede ir por la vida comparando a las mujeres con jacas (Domingo Triguero) o mongolitas (Carmelo Vega). No se puede ir por la vida implicando que somos todas unas putas solo que sin cobrar y discretas (Fraga, por cierto, ¿qué quiso decir Bono con los besos y los mordiscos?). No se puede. Ya no.
A Fraga, Triguero, Vega y Bono les ha pasado lo que a mi abuelo: que no han sabido adaptarse a los tiempos. Que no terminan de enterarse que la España de la pandereta donde a una mujer se le podían soltar autenticas burradas (véanse películas de glorias nacionales repetidas hasta la saciedad en Cine de Barrio) sin llevarse una hostia hace mucho, pero mucho tiempo que ha dejado de existir. No terminan de entender que cada vez quedan menos hombres que les rían la gracia (abiertamente, por supuesto - ese es otro tema) y no se han percatado de que las mujeres estamos más respondonas que nunca. No, no es atentar contra la libertad de expresión. Es simplemente darle una vuelta a la tortilla y que a partir de ahora sean los hombres los que tengan que pensar dos veces antes de abrir la boca, que midan sus palabras, que aprendan lo que es el miedo al rechazo social, a hacer el ridículo, que sientan la presión de sus compañeras de clase, de sus parejas, y de la opinión publica... que aprendan que no están solos en el planeta y que no vamos a dejar que sigan haciendo lo que les salga de los cojones. Que se den cuenta de que el mundo ha dejado de girar en torno a sus huevos y ahora gira en torno a nuestros ovarios.
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