Lo que me quedaba por ver

A estas alturas, en lo que se refiere a mojigatería norteamericana, debería estar curada de espantos pero no dejo de sorprenderme al enterarme de que hay grupos ultra cristianos que están protestando nada menos que por los escaparates de la cadena Victoria’s Secret. Estamos hablando de una tienda de lencería, pijamas, perfumes, cremas y maquillajes. No es un sex shop ni mucho menos.

Según estos grupos ultra puritanos, los maniquíes son ofensivos para la mujer, incitan a los hombres a la lujuria y desatan pensamientos pecaminosos en los niños. Sus portavoces creen que es necesario pasar a la acción, protestar, manifestarse y levantar sus voces cristianas contra un mundo lleno de oscuridad y perversión. Hay que ver cómo está el patio y la de tiempo libre que tiene la gente.

Victoria’s Secret
http://www.victoriassecret.com/