Afganistán - mujeres florero por ley

Unas 300 mujeres afganas se han tirado a la calle esta semana para protestar contra una nueva ley aprobada por el parlamento y firmada por el presidente Hamid Karzai que básicamente legaliza las violaciones dentro del matrimonio y refuerza la creencia de que la mujer es propiedad del hombre.

Según la nueva ley que en teoría afecta sólo a las mujeres de etnia shiita pero en la práctica abre la puerta a nuevas leyes que legislen el abuso a otras mujeres, sigue justificando el maltrato y perpetua la cultura del macho; según esta ley, no son los tribunales de justicia sino la figura equivalente a un sacerdote el que tiene autoridad moral y legal sobre el matrimonio. La ley establece que un hombre tiene derecho a acostarse con su esposa cuando se le antoje, a hacer que su esposa se vista con la ropa que a él le guste y a hacer que se maquille como a él le guste. La mujer tiene la obligación de cumplir con esos requerimientos y debe además contar con permiso de su marido para ir a la universidad (¡cuando no al colegio!) o para trabajar fuera de casa. Es decir, derechos la mujer no tiene ni uno.

Desgraciadamente todo esto no es nada nuevo. En Afganistán, Irán y otros países islámicos lleva pasando desde hace siglos y ojo que en España, desde el punto de vista legal, hasta hace no mucho las mujeres estábamos prácticamente igual y lo de que en la práctica hayamos mejorado es discutible.

En fin, dime que no sabes en qué planeta vivo, pero a mi hoy me sorprende que ni EEUU ni España hayan protestado oficialmente contra esta ley. Sobre todo Zapatero, tan rumboso él, tan feministo, mandando tropas a Afganistán para garantizar las elecciones… que sí ha dicho algo sobre la nueva ley pero podía ser un poco más contundente a la hora de expresar su repulsa. Tú y yo poco podemos hacer contra Afganistán – obviamente allí de turismo no quiere ir ni el Potito así que poco boicot vamos a organizar. Pero Zapatero sí podría decir que no manda tropas para vigilar las elecciones ni manda más ayuda económica hasta que no deroguen esa ley. No me parece de recibo que EEUU y España sigan mandando tropas, sigan invirtiendo dinero, sigan creando infraestructuras y programas de desarrollo para que, en definitiva, se beneficien unos pocos que son los mismos de siempre (un lobo es un lobo aunque se vista con piel de cordero y estos cabrones es que no se molestan en ponerse la piel ni tienen por qué: siguen chupando del bote a pesar de ser maltratadores, violadores, torturadores y asesinos) y las mujeres sigan peor que cucarachas.

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