Mes contra la Violencia Sexual en EEUU 2009
En EEUU en abril se celebra el Mes Contra la Violencia Sexual y este año la campaña está destinada a prevenir la violencia sexual en el trabajo. Violencia sexual es cualquier tipo de comportamiento sexual hacia tu persona para el que no hayas dado un comportamiento expreso. Puede ir de un simple beso a una violación. Según SAAM, entre 1993 y 1999, hubo 36,500 agresiones sexuales y violaciones en los lugares de trabajo. A mí me pasó algo curioso en el 2004: un compañero de trabajo, un señor mayor ecuatoriano que por edad podría ser mi abuelo, le cogió gusto a venir a saludarme por las mañanas y plantarme un beso en la frente. Yo, que soy muy borde pero también muy educada, lo dejé correr un día, lo dejé correr dos, pero al tercero le pregunté si creía que era el Papa y el hombre ya no volvió a hacerlo más. Habrá quien diga que un beso en la frente no es acoso sexual: a mí me hacía sentir incomoda y no era apropiado para la oficina así que lo corte de raíz.
No a todas nos besan o nos violan, pero no hay que hacer mucha memoria para acordarse de comentarios ofensivos, bromas de mal gusto, compañeros que no sólo pierden el tiempo en la oficina mandando fotos y viideos porno sino que encima te los quieren enseñar… eso también es acoso sexual. Antes quizá era por edad (por el famoso cambio generacional) y ahora que ya tenemos a algunos cromañones educados, nos enfrentamos al outsourcing (dime tú a mí qué derechos sexuales tiene una mujer en México o en la India si culturalmente su lugar en la sociedad está tres metros detrás del de un hombre) y a los compañeros de trabajo que vienen de culturas donde la mujer vale menos que la suela del zapato que calzan. En definitiva, por una razón u otra, sigue habiendo mucho hombre que piensa que tu puesto en la oficina se reduce a esperar a que se digne a poner los ojos en ti, agarrarte, acariciarte y sobarte en la sala donde se guarda el material de oficina. A mí no me ha pasado nunca pero sé de dos casos en los que las mujeres han pedido un cambio de oficina o han dejado la compañía porque no han podido pararles los pies solas y no querían tener problemas. Aún en compañías grandes que tienen planes y normas anti-acoso sexual, donde nada más contratarte te tienes que tragar una clase de dos horas sobre acoso sexual, donde los hombres tienen que pedirte permiso para entrar en tu cubículo no porque la compañía se preocupe por tu bienestar, ojo!, simplemente para cubrirse las espaldas en caso de que te pase algo y los denuncies x acoso sexual… aún en estas grandes compañías, la mujer tiene que irse con la música a otra parte. Si te acosan, en teoría deberías llamar a Recursos Humanos pero por supuesto la que acaba con la etiqueta de “loca problemática” puedes ser tú. Una vez vale, dos ya eres tú la que tiene un problema.
Según SAAM el coste de la violencia sexual en el trabajo es un gran absentismo, baja productividad y baja moral de los empleados, subida del coste médico y quizá grandes sumas de dinero gastadas en abogados si la victima denuncia a la empresa por o hacer nada mientras ella era víctima de acoso sexual o violación.
Además de clases y cursillos para los empleados, existen otras formas por las que las empresas pueden prevenir el acoso sexual en el trabajo. Una de ellas es tener carteles recordando los derechos de las mujeres y los pasos a seguir para denunciar acoso sexual en el trabajo en cada planta {es que aquí es obligatorio que pongan la información sobre condiciones de trabajo, paga mínima por hora, etc luego al lado podían poner otro con esta información}. Otra, donando dinero y realizando actos conjuntos con albergues para mujeres, centros de salud que trabajen específicamente con víctimas de violaciones y acoso sexual. Otra, organizando un comité que se encargue de coordinar actividades conjuntas con centros de prevención y tratamiento de la violencia sexual - por lo menos en el banco donde trabajaba muchos empleados ya donan su tiempo como voluntarios para otras causas (Sida, cáncer de mama, reconstrucción de colegios y casas en New Orleans, ayuda en centros LGBT, limpieza de parques, etc).
Hoy es el “día de acción” lo que significa que se van a desarrollar lecturas poéticas, performances artísticas, conferencias, caminatas y todo tipo de actos simbólicos para dar visibilidad al problema, información/ayuda a mujeres y hombres que estén siendo víctimas de acoso sexual y distribuir guías con pasos a seguir para los profesionales de recursos humanos que todavía no tengan un plan anti-acoso sexual en colegios, universidades, compañías y pequeñas empresas, etc; entre otras cosas. En la página web de SAAM se puede ver un calendario de eventos e información sobre la campaña en español.
SAAM
http://www.nsvrc.org/saam
Información sobre la campaña en español
http://www.nsvrc.org/saam/current-campaign/09palmcard-spanish
No a todas nos besan o nos violan, pero no hay que hacer mucha memoria para acordarse de comentarios ofensivos, bromas de mal gusto, compañeros que no sólo pierden el tiempo en la oficina mandando fotos y viideos porno sino que encima te los quieren enseñar… eso también es acoso sexual. Antes quizá era por edad (por el famoso cambio generacional) y ahora que ya tenemos a algunos cromañones educados, nos enfrentamos al outsourcing (dime tú a mí qué derechos sexuales tiene una mujer en México o en la India si culturalmente su lugar en la sociedad está tres metros detrás del de un hombre) y a los compañeros de trabajo que vienen de culturas donde la mujer vale menos que la suela del zapato que calzan. En definitiva, por una razón u otra, sigue habiendo mucho hombre que piensa que tu puesto en la oficina se reduce a esperar a que se digne a poner los ojos en ti, agarrarte, acariciarte y sobarte en la sala donde se guarda el material de oficina. A mí no me ha pasado nunca pero sé de dos casos en los que las mujeres han pedido un cambio de oficina o han dejado la compañía porque no han podido pararles los pies solas y no querían tener problemas. Aún en compañías grandes que tienen planes y normas anti-acoso sexual, donde nada más contratarte te tienes que tragar una clase de dos horas sobre acoso sexual, donde los hombres tienen que pedirte permiso para entrar en tu cubículo no porque la compañía se preocupe por tu bienestar, ojo!, simplemente para cubrirse las espaldas en caso de que te pase algo y los denuncies x acoso sexual… aún en estas grandes compañías, la mujer tiene que irse con la música a otra parte. Si te acosan, en teoría deberías llamar a Recursos Humanos pero por supuesto la que acaba con la etiqueta de “loca problemática” puedes ser tú. Una vez vale, dos ya eres tú la que tiene un problema.
Según SAAM el coste de la violencia sexual en el trabajo es un gran absentismo, baja productividad y baja moral de los empleados, subida del coste médico y quizá grandes sumas de dinero gastadas en abogados si la victima denuncia a la empresa por o hacer nada mientras ella era víctima de acoso sexual o violación.
Además de clases y cursillos para los empleados, existen otras formas por las que las empresas pueden prevenir el acoso sexual en el trabajo. Una de ellas es tener carteles recordando los derechos de las mujeres y los pasos a seguir para denunciar acoso sexual en el trabajo en cada planta {es que aquí es obligatorio que pongan la información sobre condiciones de trabajo, paga mínima por hora, etc luego al lado podían poner otro con esta información}. Otra, donando dinero y realizando actos conjuntos con albergues para mujeres, centros de salud que trabajen específicamente con víctimas de violaciones y acoso sexual. Otra, organizando un comité que se encargue de coordinar actividades conjuntas con centros de prevención y tratamiento de la violencia sexual - por lo menos en el banco donde trabajaba muchos empleados ya donan su tiempo como voluntarios para otras causas (Sida, cáncer de mama, reconstrucción de colegios y casas en New Orleans, ayuda en centros LGBT, limpieza de parques, etc).
Hoy es el “día de acción” lo que significa que se van a desarrollar lecturas poéticas, performances artísticas, conferencias, caminatas y todo tipo de actos simbólicos para dar visibilidad al problema, información/ayuda a mujeres y hombres que estén siendo víctimas de acoso sexual y distribuir guías con pasos a seguir para los profesionales de recursos humanos que todavía no tengan un plan anti-acoso sexual en colegios, universidades, compañías y pequeñas empresas, etc; entre otras cosas. En la página web de SAAM se puede ver un calendario de eventos e información sobre la campaña en español.
SAAM
http://www.nsvrc.org/saam
Información sobre la campaña en español
http://www.nsvrc.org/saam/current-campaign/09palmcard-spanish
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