Estadísticas sobre stalking en EEUU
En español no tenemos un equivalente para el verbo stalk. En general, stalking es la persecución, acoso y derribo que padecen 3.4 millones de personas en este país. Formas de acoso son cualquier tipo de contacto no deseado entre un acosador y su víctima; persecución y vigilancia, acercamiento y enfrentamiento inadecuados entre un acosador y su víctima; aparición repentina en el lugar de trabajo o residencia de la víctima, llamadas telefónicas no deseadas, amenazas a la víctima, amenazas a la familia y amistades de la víctima’ cartas, emails, faxes no deseados; regalos no deseados con o sin notas; páginas web o perfiles que el acosador ha rellenado con información falsa de la víctima, daño a la propiedad de la víctima; ataques físicos y verbales, malos tratos, agresiones sexuales y violaciones.
El Departamento de Justicia ha publicado un informe de 16 páginas sobre stalking que, entre otras cosas, revela que:
- 3.4 millones de personas son víctimas de algún tipo de acoso anualmente.
- El 50% de las víctimas ha tenido algún tipo de contacto no deseado con su acosador semanalmente.
- El 11% de las víctimas ha sido acosada durante cinco o más años.
- En el 66% de los casos el acoso fue hecho mediante llamadas telefónicas.
- En el 31% de los casos también hubo cartas o emails no deseados.
- El 36% de las víctimas tiene que hacer frente a rumores que la otra persona se dedica a propagar.
- 1/3 de las víctimas declaró que sus acosadores se presentaban en cualquier lugar buscándolas o esperándolas.
- Más de 1 de cada 4 víctimas ha sufrido algún tipo de ciberacoso – un 83% de víctimas fue acosado mediante email y un 35% a través de mensajes instantáneos. Un 13% de víctimas fue acosada con otro tipo de métodos de control electrónico, cámaras de vídeo tradicionales y digítales.
- Casi el 75% de las víctimas conocía a sus acosadores. De los acosadores conocidos el 22% correspondía a la ex pareja de la víctima y el 16% a amigos, compañeros de piso o vecinos.
- El 46% de las víctimas de acoso han experimentado estrés por no saber qué podría pasarles y un 29% pensaba que el acoso no acabaría nunca.
- Alrededor de 130,000 víctimas perdieron sus trabajos a causa del acoso – bien fueron despedidas o invitadas a dejar sus puestos de trabajo. 1/8 de las víctimas perdieron tiempo de trabajo por temor a su seguridad do por tener que cogerse días libres para pedir órdenes de alejamiento o testificar en juicios contra sus acosadores. Más de la mitad de las víctimas perdió cinco días o más de trabajo.
El Departamento de Justicia ha publicado un informe de 16 páginas sobre stalking que, entre otras cosas, revela que:
- 3.4 millones de personas son víctimas de algún tipo de acoso anualmente.
- El 50% de las víctimas ha tenido algún tipo de contacto no deseado con su acosador semanalmente.
- El 11% de las víctimas ha sido acosada durante cinco o más años.
- En el 66% de los casos el acoso fue hecho mediante llamadas telefónicas.
- En el 31% de los casos también hubo cartas o emails no deseados.
- El 36% de las víctimas tiene que hacer frente a rumores que la otra persona se dedica a propagar.
- 1/3 de las víctimas declaró que sus acosadores se presentaban en cualquier lugar buscándolas o esperándolas.
- Más de 1 de cada 4 víctimas ha sufrido algún tipo de ciberacoso – un 83% de víctimas fue acosado mediante email y un 35% a través de mensajes instantáneos. Un 13% de víctimas fue acosada con otro tipo de métodos de control electrónico, cámaras de vídeo tradicionales y digítales.
- Casi el 75% de las víctimas conocía a sus acosadores. De los acosadores conocidos el 22% correspondía a la ex pareja de la víctima y el 16% a amigos, compañeros de piso o vecinos.
- El 46% de las víctimas de acoso han experimentado estrés por no saber qué podría pasarles y un 29% pensaba que el acoso no acabaría nunca.
- Alrededor de 130,000 víctimas perdieron sus trabajos a causa del acoso – bien fueron despedidas o invitadas a dejar sus puestos de trabajo. 1/8 de las víctimas perdieron tiempo de trabajo por temor a su seguridad do por tener que cogerse días libres para pedir órdenes de alejamiento o testificar en juicios contra sus acosadores. Más de la mitad de las víctimas perdió cinco días o más de trabajo.
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