El chou de la cabra Benito (versión londinense)

A principios de mes un conductor de autobús detuvo su autobús en pleno Londres durante la hora punta, se bajó, sacó su alfombra, la colocó en el suelo, se arrodilló y se puso a rezar ante el asombro del personal que pensaba que aquello se trataba de un atentado terrorista. La empresa o el departamento de transporte ha emitido un comunicado diciendo que sus empleados tienen habilitadas unas zonas para la oración y que respetan la libertad religiosa de sus empleados pero esta no debe coincidir con su horario de atención al público lo cual me parece muy acertado. Una cosa es ser tolerante y respetuoso con las creencias de cada cual y otra es ser gilipollas. Espero que a este conductor lo despidan o que lo pongan en algún puesto donde no esté de cara al público. Supongo que en Londres pasará como en Nueva York donde para ser conductor de autobuses tienes que ser o ciudadano o residente - en ambos casos, bien porque hayas nacido en el país que sea, bien porque lleves años viviendo allí (a nadie le regalan la residencia {lleva su tiempo} y a nadie le dan hoy la residencia y mañana un trabajo de conductor), conoces perfectamente las costumbres locales. Vamos, que ese conductor sabía perfectamente lo que hacía cuando montó el numerito de la cabra Benito que montó sin venir a cuento.

Musulmán, católico, judío... La religión no debe ser un circo sino algo que se practica en la intimidad de tu casa o en el templo/sinagoga/iglesia/mezquita. No he visto en mi vida a nadie rezar en horario de oficina. He tenido compañer@s de trabajo judíos que han salido un par de horas antes los viernes - pero que han trabajado horas extras el resto de la semana para compensar. He tenido compañer@s de trabajo musulmanes que nunca han rezado en horario de oficina. He trabajado con católic@s y no han dejado de ir a trabajar un miércoles de ceniza - simplemente han ido a misa antes o después del trabajo.

Allá cada cual con la religión que profese. Trabajando para una empresa publica o privada, es de cajón que esté prohibido hacer equis pausas al día para rezar. Otra cosa es que el negocio sea suyo como una tienda de los 99 centavos que hay cerca de mi casa que cierra 2 horas a medio día los viernes porque van a rezar - ahí ya no entro. Si es un negocio privado y pueden permitirse perder dinero y clientes, allá ellos con lo que hagan.