Libertades individuales en la red

No entro en el mito de internet gratuito porque salvo que robes la conexión de tus vecinos o alguna cafetería, quien más y quien menos tiene que pagar X cantidad todos los meses a la compañía telefónica de turno para disfrutar de internet donde le dé la gana. A la chita callando, las grandes compañías se están cargando la libertad de presan y la libertad de opinión. Como no es un movimiento que abiertamente venga de ningún gobierno (como pasa en China), estamos pasando por el aro sin darnos cuenta de que nos la meten doblada.

Hace un par de semanas se medio lió porque Verizon y Google han estado hablando sobre acceso a información, modelos de financiación y no sé qué rollos. La verdad es que no le presté demasiada atención porque el tema iba de la prioridad que se le daba a unas noticias sobre otras y a unas páginas sobre otras según el dinero que hubiera de por medio y eso hace ya años que vienen haciéndolo – por ejemplo, yo tengo mi página web en WordPress con dominio comprado en yahoo. Si googleo mi página web no me sale, sale con el dominio de WordPress. Si la busco en yahoo, ya sí que me sale la versión .com. ¿Justo? No. Pero es lo que hay. Si eso lo hacen con simples mortales, imaginaos lo qué harán con cadenas de televisión, radios, periódicos y revistas: los que tengan presupuesto para hacer marketing online estarán en los primeros puestos de los buscadores y los que no, aparecerán en las últimas páginas en las que no entra nadie porque ya se ha aburrío de mirar cosas. Además de este problema, ya hace tiempo que bastantes periódicos están cobrando por leer las noticias y o tienes que estar abonado para leer determinadas noticias que suelen ser las más jugosonas (El Mundo en España por poner un ejemplo) o tienes que acceder a internet a través de determinada compañía para poder leer sus noticias (Newsday y Cablevision en Nueva York por poner otro).

Ahora es la ciudad de Philadelphia la que ha hecho saltar la voz de alarma entre la comunidad bloguera porque el ayuntamiento se ha sacado de la manga que l@s bloguer@s tienen que incorporarse como autónomos (como si dijéramos) y pagar $300 en concepto de incorporación de pequeña empresa más impuestos y tasas. Como la idea se extienda no veas. Hay gente que tiene publicidad en el blog y gana dinero, pero hay muchísima gente que, como yo, nos dedicamos a bloguear por amor al arte. Si me dicen que tengo que pagar $300 por darme de alta como autónoma y además pagar impuestos y todas las tasas que se le ocurran, cierro el chiringuito. Esto es además peligroso porque estamos jugando con la libertad de expresión. Si la ciudad de Philadelphia no da marcha atrás ¿qué pasa con las personas que no puedan permitirse esos $300? ¿les cierran los blogs? ¿no tienen derecho a seguir usando internet para expresarse? ¿sólo tiene derecho a la libertad de expresión el o la que pueda permitírselo?