El morbazo de lo lésbico

En Granada están juzgando al líder de una secta pseudo religiosa que operaba en Armilla y alucino con el tratamiento que los medios de comunicación están dándole a la noticia; sobre todo cuando se trata de contar las técnicas de control mental: los adeptos tenían que estar disponibles 24 horas al día, se les limitaba la comida, se controlaban sus horas de sueño, etc. Lo típico de cualquier secta como también es típico que hubiese abusos sexuales de por medio y ahí es donde los medios de comunicación aprovechan para explotar el tema lésbico.

Qué curioso que cuando se conquistan derechos o se produce alguna agresión los medios de comunicación metan a las lesbianas en el cajón de lo homosexual (es decir, nos invisibilizan bajo el masculino singular o plural {para ellos} genérico), pero cuando el líder de una secta obliga a sus miembros a tener relaciones sexuales ya sí les resulte necesario puntualizar "relaciones lésbicas" (¿para vender más periódicos? ¿para qué a los lectores se les ponga morcillona?) como si los tríos o las orgias que organizase este iluminao no incluyesen a otros hombres.