Buitres

Leslie Feinberg tiene una hermana que ha publicado una pseudo novela sobre la vida de un transexual – la ha publicado y la está vendiendo gracias a su experiencia de primera mano siendo “hermana de”. La cosa ha llegado a tal punto que Leslie ha tenido que salir de su semi-retiro (por razones de salud que no vienen al caso) para declarar públicamente que lleva sin hablarse con sus padres o su hermana más de 40 años, que siempre viaja con documentación asegurándose de que si acaba en un hospital el equipo médico no llama a su familia y entiende que su pareja, Minnie Bruce Pratt, con la que lleva desde 1992, es la que debe tomar las decisiones médicas pertinentes si es que ella no está en condiciones de decidir por sí misma (léase inconsciente o bajo un coma provocado).

Su hermana es una buitre lo mismo que son buitres las personas que no te hablan en vida pero luego corren a la primera fila e incluso hablan en tu funeral o en tu memorial service (¿servicio o ceremonia conmemorativos? No sé cómo se dice en español) rasgándose la camisa, actuando como viuda en funciones o dando a entender que la muerta y ella eran amigas del alma aunque llevasen sin verse 30 años o aunque la orante hubiese puesto a parir a la muerta a sus espaldas. Son cosas que no entiendo. Si en vida no te cae bien alguien, no has tenido mucho o trato o, todavía peor, te has dedicado a ponerla a parir o levantar falsos testimonios ¿para qué vas al funeral? ¿para lucirte? Yo he visto concretamente el caso de la ex de una amiga mía que le puso los cuernos y cuando mi amiga murió la tía tuvo los santos ovarios de organizar ella el memorial serfveice, dejando fuera a las amigas de la muerta y poniéndose medallas como ex novia y amiga… ¡cuando mi amiga tenía ya otra novia! A día de hoy, año y medio largo desde la muerte de mi amiga, esta tipeja sigue explotando el rollo de viuda desconsolada. Tengo fotos de esta mujer con la tía con la que le puso los cuernos a mi amiga y mi trabajo me cuesta, no creas, mi trabajo me cuesta no hacer y fotocopiar carteles y empapelar acto seguido todo Brooklyn y el Village pa’que la gente vea que esa de santa tiene lo que yo de monja.

A lo que voy es que, si no quieres a ciertas personas en tu vida tanto en vida como cuando te hayas muerto, sería recomendable que te cubrieras las espaldas redactando algún documento (testamento, proxy letters que en EEUU se usan para que en los hospitales sepan quién puede tomar decisiones médicas por ti, lista de personas que no quieres en tu funeral, etc) y hacer que te lo un/a notario por si las moscas.

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