Despedida a la francesa

Un ejecutivo intentó violar a una camarera de un hotel céntrico Neoyorkino hace una semana escasa. Al poder zafarse ella y denunciarlo al personal del hotel, el hombre salió por pies. Le entraron unas prisas tremendas por volver a su país de origen (Francia), tan tremendas que se dejó la mitad de la ropa y hasta el teléfono móvil en la habitación del hotel. La policía lo detuvo en pleno aeropuerto y se lo llevó a comisaría a tomarle declaración. Esta noticia no habría trascendido de no ser el hombre el presidente del Fondo Monetario Internacional. No es sólo que un hombre que ocupe un cargo así debiera saber comportarse, debería respetar a las mujeres, es que no es el primer incidente. El hombre por lo visto en Francia es conocido por ser un "picaflor" - forma suave y decorosa de ir tapando sus intentos de violación, sus sobeteos y sus acosos sexuales a casi toda la que se le pone por delante. Cómo y por qué mantienen a un hombre así al frente del Fondo Monetario Internacional o al frente de cualquier organización? Es nauseabundo.

A partir de ahora ya no queda duda ni nos puede producir extrañeza que a las mujeres nos jodan vivas económicamente. Si con la crisis económica, los rescates económicos a bancos y demás se ha puesto en tela de juicio dónde está el dinero para garantizar los derechos de las mujeres, ahora tenemos la respuesta: con un cromañón así al frente, está claro que para el Fondo Monetario Internacional la mujer no ha sido nunca una prioridad ni un objetivo en sus planes de rescate, apoyo y demás. Pa'lo único que nos quieren es pa'follar y follar sigue siendo gratis o muy barato en cualquier país del mundo.