Feminismos lesbianos. Lesbianas feministas. Feministas lesbianas.


© Bàrbara Ramajo Garcia
Fuente: http://www.feministas.org/IMG/pdf/Identidades_Barbara_Ramajo.pdf 

IDENTIDADES POLÍTICAS
FEMINISMOS LESBIANOS/LESBIANAS FEMINISTAS/FEMINISTAS LESBIANAS


En el 2003, en Barcelona, en el Espacio de Debate Teórico: QueroSeno, Cultures i Identitats Lesbianes. ¿O no? Iniciamos una aventura intelectual donde una de las grandes temáticas era darle vueltas a lo que a nosotras nos parecía una tibia/nula aparición/desaparición de las Lesbianas en los Discursos/Imágenes Públicas de los Feminismos, a nivel local/estatal/internacional. Por otro lado, Ca la Dona, en el 2005, inició un interesante aunque breve Debate titulado: ¿Dónde está la agenda del Lesbianismo en el Feminismo?, donde un conjunto de Identidades Políticas: Lesbianas Feministas/Feministas Lesbianas/Feministas no Lesbianas, nos sentamos a desgranar, entre todas, un asunto que a todas nos corresponde.

Al hilo de aquellos encuentros, hoy en día, siguen vigentes algunas preguntas sin contestar que aunque parten de realidades locales, bien se podrían generalizar: ¿Cómo es posible que precisamente ahora, cuando Barcelona es una ciudad Lesbiana por excelencia/abundancia, cuando socialmente/culturalmente se “Normalizan” las Lesbianas, como es posible que en estos contextos favorables de Existencias Lesbianas, los Discursos/Imágenes Públicas de los Feminismos (sean estos Académicos, Institucionales, Sociales) brillan por la ausencia continuada de Discursos/Imágenes de Lesbianas? ¿Podemos decir qué, actualmente, los Feminismos se presentan/entienden, de entrada, como Heterosexuales? ¿Qué ha pasado con las Lesbianas Feministas? ¿Por qué somos las Lesbianas Feministas las únicas responsables de visibilizar a las Lesbianas dentro/fuera de los Feminismos? ¿Por qué los Feminismos dejan de/olvidan/obvian cuestionar las Heterosexualidades Normativas como Instituciones de Poder? ¿Han dejado de ser las Heterosexualidades Normativas campos de intervención para las Acciones/Teorías Feministas de forma generalizada? ¿Es posible que existan más Lesbofobias dentro de las filas Feministas que fuera de las mismas? ¿Existen Cuerpos Lesbianos de los Feminismos que sólo se muestran, tal cual son, dentro del confort de las Casas/Grupos/Espacios Feministas? ¿Por qué cuando en la actualidad se narran las Historias de los Feminismos, desaparecen las Lesbianas Feministas de los grandes Debates, que colectivamente protagonizamos, y sin embargo, son recordados/citados/historiografiados, desde posiciones individuales o colectivas, simplemente como Académicas, Feministas, Queer…? ¿Qué ha pasado con los Espacios Políticos de los Feminismos Lesbianos, de las Lesbianas Feministas y de las Feministas Lesbianas? ¿Podría decirse que las Lesbianas Feministas hemos quedado invaginadas dentro de los Cuerpos de los Feminismos, en actos de (auto)enclaustración, silencios y olvidos que proyectan una reescritura aséptica/acrítica de la Historia? ¿No es este silenciamiento, de las Lesbianas Feministas en las Imágenes/Discursos/Historias de los Movimientos Feministas, un ejemplo claro de cómo actúan los Poderes a través de sus Resistencias? En definitiva, y esto es una afirmación: Sigue haciéndose necesario, después de 9 años, seguir preguntándose ¿Aquí que pasa con el Lesbianismo? Pero… ¿Hace falta que sólo nos lo preguntemos las Lesbianas, o éstas y otras preguntas se hacen extensibles al conjunto de los Movimientos Feministas?


IDENTIDADES POLÍTICAS

Abordar las Identidades, es algo vivo, cambiante, indefinido… y sin embargo, los Debates Identitarios, son tan ineludibles como lo son las mismas Identidades que tratamos de analizar, enfatizar u obviar. Teniendo en cuenta esto, propongo partir de la idea de que las Identidades funcionan con lógicas Simbólicas, ello conlleva que tienen una parte Normativa (un ideal ficcional) y una parte Sensitiva (un ideal subjetivo vivencial) que son intrínsecas a todo Proceso Identitario. Esto quiere decir que todas las Identidades funcionan, a la vez, como “Norma” y como “Vivencial de Pertenencia”. Así, ser Lesbianas, Lesbianas Feministas, Feministas Lesbianas, Feministas…, requerirá siempre de unos requisitos (Identidades Asignadas) que forman parte de imaginarios colectivos concretos, y de unos sentimientos de Identificación y Pertenencia que son siempre subjetivos (Identidades Asumidas). Ambos polos funcionan Simbólicamente y lo pueden hacer en sintonía, o no, es decir, se pueden tener vidas Lesbianas y no sentirse Lesbianas, se pueden tener vidas Feministas y no sentirse Feministas… A esto, propongo añadir que las Identidades se construyen/destruyen/reconstruyen desde enclaves/referentes Conceptuales (como nos ven), Subjectuales (como nos vemos) y Prácticos (como nos dejamos ver), en continua relación, pero, que no tienen por que ser coherentes entre sí. Así pues, podemos ser leídas como una cosa, mientras que nos sentimos que somos otra, y nos expresamos corporalmente según nos dé (aceptando/transgrediendo normas sociales). Otro aspecto de las Identidades, es que cohabitan en Centros Identitarios, desplegando un abanico de “yos/nosotras” que intensifican/minimizan su acento según los Contextos/Subjetividades, es decir, los Centros Identitarios siempre son variables, según sean los Contextos, y hasta la más Independentista puede tener un ataque de “Españolismo” si se encuentra a alguien hablando Castellano en el Khazajistan. Otro elemento a tener en cuenta es que estos “yos/nosotras” se pueden construir en referencia/relación a las “otr@s”, pero también (y esto a veces se da por imposible) sin contar con las “otr@s”. En los tiempos que corren se da por sentado que las Identidades se construyen por contraste (soy lo que la otr@ no es), pero… ¿No es esta una lógica dualista que impide romper con las dicotomías? Si los Límites Corporales/Sociales/Culturales son movibles, confusos y difusos… ¿Como podemos saber que las Identidades no se construyen sobre Ejes de Centralidades y como podemos continuar suponiendo que lo hacen a través de sus Periferias? Es decir… ¿Somos Mujeres/Lesbianas porque no somos Hombres/Heterosexuales, o quizás, lo seamos por lo que hacemos/sentimos autoconstruyéndonos a nosotras mismas, desde nosotras, desde lo que nos pasa y quienes somos, y no desde lo que no nos pasa y quienes no somos? Esto se puede llegar a pensar así si partimos de la posibilidad de contemplar las afirmaciones Identitarias (soy/me siento/somos/nos sentimos Lesbianas/Feministas) como resultado, y a la vez causa, de la imposibilidad de trazar demarcaciones claras de lo que está a una banda y otra de lo que se quiere definir/identificar. Es decir, ninguna de las Identidades, ni siquiera las menos contestadas, tienen unas fronteras claras, capaces de marcar con, y sin contradicción, lo que se es/no es. Y si esta imposibilidad se da en todas las Identidades, quizás sea hora de tener en cuenta la posibilidad de que sean esos Perímetros confusos, y difusos, los que permiten tanto el tránsito, como la creación/recreación de Identidades. Es decir, es tan aplicable la máxima del Lesbiano Feminismo que cualquier Mujer puede ser Lesbiana, como decir que cualquier Lesbiana puede dejar de ser Mujer, como que una pueda ser/sentirse Mujer/Lesbiana en cualquier momento de su vida, dejar de serlo, o seguir sintiéndose como tal y no tener conciencia política ni de los Lesbianismos, ni de los Feminismos, o bien, tener la quiniela al completo, en cualquier caso, una cosa no tiene por que llevar a la otra, de la misma forma que unos Perímetros indefinidos de las Identidades, ni cuestionan, ni esencializan, las mismas.

La facilidad con que unas Identidades, y no otras, se ponen bajo sospecha existencial, me hace preguntar a quién, y desde dónde, se pide/pedimos que se definan/identifiquen al respecto de unas Identidades, mientras que no hay las mismas exigencias respecto a otras. Es decir… ¿Qué Identidades hay que explicar, cuáles no, y por qué? ¿Qué Identidades se las califica de Esencialistas, Imperialistas, Etnocéntricas, Uniformantes, Inexistentes? ¿Acaso no son todas las Identidades, Ideales Ficcionales? ¿No son todas, modelos sociales de perfección imaginaria, consensos conceptuales colectivos inalcanzables de realizar? Si nunca se llega a ser/estar/alcanzar los Conceptos Idealizados Normativos Identitarios, y esto es en ningún caso, por qué entonces, sólo algunas Identidades son requeridas al reconocimiento/aceptación de su Ficción? Es decir, teniendo en cuenta que nunca he cumplido/cumplo/cumpliré los Requisitos Ideales Normativos Ficcionales de lo que se considera ser “Mujer”… ¿Quiere esto decir que mi Identidad de Género queda invalidada? Cuando a pesar de mi manifiesta Masculinidad, afirmo que soy/me siento muy Mujer, estoy poniendo de manifiesto que a pesar de la Ficcionalidad Identitaria Mujer, existo/soy/me siento Mujer. Es decir, que las Identidades, persisten/insisten/existen/trascienden los Ideales Normativos, y que este coeficiente de diferencia entre lo Ficcional, y lo que se es/siente una, no sólo no invalida las Identidades, si no que las crea/recrea/enriquece/alimenta/retroalimenta. De esta forma, plantear insostenibilidades/inviabilidades Identitarias debidas a este diferencial entre Ficciones/Constructos Sociales, siempre irrealizables en su máximo fin, y ser/sentirse Mujeres/Lesbianas, son perspectivas parcializadas que han venido utilizándose con intereses demoledores, teniendo como diana, sólo, a algunas Identidades. Quizás vaya siendo hora de preguntarnos desde donde, desde qué Identidades se ponen en duda otras Identidades, cuales sí y cuáles no. Es decir… ¿Por qué, dentro de los Feminismos vivimos sin angustia existencial la necesidad de interrogar/explicar/argumentar, desde siempre, qué/quién es ser/sentirse/estar Lesbiana, mientras que preguntar/contestar qué/quién es ser/sentirse/estar Mujer se vive como terremoto existencial? ¿No deberíamos aplicar los mismos criterios interrogativos a las Identidades Sexuales Lesbianas que a las Identidades de Géneros Mujeres?

A esta falta de equidad interrogativa, habría que añadir algunos argumentos que plantean una contraposición entre Diversidad e Identidad, proponiendo que la Identidad uniformiza y por tanto se apuesta por trabajar desde alternativas no Identitarias… ¿Existen realmente alternativas no Identitarias? ¿O es que se están poniendo los acentos políticos en otras Identidades? ¿Se puede aplicar la misma crítica a las Identidades Lesbianas (Identidades Sexuales) que a las Identidades Mujeres (Identidades de Géneros)? ¿Se puede decir que “Mujer” es una Identidad “fuerte” que invisibiliza el universo de diversidad de Mujeres, de ser y sentirse como tales, y que hay y por tanto hace falta invalidar el Concepto y buscar en las pluralidades de los significados una forma de trabajar que se escape a la Identidad “fuerte” de Mujer? Otras propuestas requieren la necesidad de crear estrategias que escapen las Identidades, argumentando que trabajar con Identidades es “Reforzar” la Categoría Identitaria que se pretende Resistir. A mi entender, esto, no deja de ser un recurso normativo/punitivo en tanto que parte de una lógica no positiva que confronta las Categorías, en vez de ponerlas en relación, dejando a quienes sí trabajan Identitariamente con la fatalidad de ser/sentirse “Colaboracionista”. Pero… ¿Qué significa “Reforzar”? ¿Se puede concretar más allá del sobreentendimiento de la acción del verbo? ¿Se puede poner en relación la medida de “Reforzar” con el valor revolucionario de las Identidades Políticas (Feminismos/Lesbianismos) como puntos de Resistencias móviles que hacen posible pequeños/grandes cambios sociales en/desde las diferentes formas de ser/sentirse/hacer cotidianos? Tanto los Feminismos como los Lesbianismos son Identidades Políticas Colectivas que actúan como Resistencias a los Poderes, pero también son Instrumentos mediante los que actúan esos mismos Poderes, puesto que intrínsicamente forman parte de los mismos Poderes que se contestan. Una de las formas más claras que puedo observar de cómo actúan los Poderes a través de sus Resistencias, se da en los Debates Identitarios, donde, la fragmentación Identitaria del Sujeto “Mujer” es un reclamo que proviene/deviene desde su propia diversidad de Movimiento Social Político, de la necesidad de reflejar su pluralidad constitutiva en los Discursos/Imágenes Públicas de los Feminismos, y sin embargo, en las narraciones actuales, más de una vez he oído/leído atribuir los méritos a Feministas Negras y Chicanas, olvidando que gran parte de esas Feministas Negras y Chicanas eran/son Lesbianas Feministas, y olvidando mencionar, específicamente, a las Lesbianas Feministas.


FEMINISMOS LESBIANOS/LESBIANAS FEMINISTAS/FEMINISTAS LESBIANAS

Parece que los Feminismos Lesbianos, a lo largo de nuestras Historias, se han constituido en la instancia a dos ejes que han funcionado como Constante matemática a lo largo de Tiempos y Contextos: La llamada a la participación de todas las Lesbianas que forman parte de los Movimientos Feministas a involucrarse en los temas/grupos de Lesbianas Feministas, y la llamada a las Mujeres de los Movimientos Feministas a que cumplan con la Visibilidad de las Lesbianas en los Discursos/Imágenes Públicas de los Feminismos. Pero… ¿Y si estos dos ejes constitutivos de las Identidades Lesbianas Feministas/Feministas Lesbianas fuesen tan Ficcionales/Ideales/Inalcanzables como son las Identidades Conceptuales Normativas? ¿Quedaría algo que aglutine a las Lesbianas Feministas/Feministas Lesbianas? Es decir, que pasaría si nos diésemos cuenta que, estamos pidiendo a las Lesbianas lo que no pedimos a las Mujeres: de la misma manera que no pedimos a todas las Mujeres que prioricen sus Identidades de Género en materia Política, es decir que prioricen ser Feministas por encima de un sinfín de Identidades Políticas más, no veo por qué no aplicar la misma lógica al Lesbianismo ¿Por qué pedimos a todas las Lesbianas que conocemos dentro de los Feminismos que prioricen sus Identidades Sexuales en materia Política? Es decir, una puede tener conciencia de Género y sentirse muy Mujer, puede tener conciencia Sexual y sentirse muy Lesbiana, pero estas Identidades no tienen por qué corresponderse con exigencias de coherencias Políticas ¿Qué pasaría si dejáramos de presionar para que las Lesbianas aparezcan en los Discursos Públicos de los Feminismos? ¿Nos disolveríamos las Lesbianas Feministas en las Identidades Políticas de los Feminismos, o es que las Identidades Políticas de los “Feminismos” siempre fueron/son algo bien diferente de las Identidades Políticas de las Lesbianas Feministas? ¿No es hora de que vayamos más allá de la queja, reiterada a lo largo de los Tiempos/Contextos, del desentendimiento de los asuntos Lesbianos, por parte de muchas de las Feministas con vidas Lesbianas, y de la inequidad del “si yo he abortado tú también eres lesbiana”?

En los Feminismos Lesbianos, hubo un Tiempo/Contexto que se logró producir un Discurso capaz de articular a las Lesbianas Feministas/Feministas Lesbianas y catapultar una Imagen Pública solidaria de los Feminismos Lesbianos y de los Feminismos como un “Continuum Lesbiano” (Rich, 1980). El “Todas somos Lesbianas” que brindo el “Lesbianismo como Opción Política”, donde las relaciones de Solidaridad/amor/amistad/compañía se vinculaban/fusionaban con la capacidad de “Todas las Mujeres” de poder aventurarse a ser Lesbianas, independientemente de si se mantenían relaciones Sexuales, o no, puesto que la Sexualidad se extendía más allá de lo coital/genital. La Hegemonía de este Discurso en los Feminismos Lesbianos visibilizó, por fin, a las Lesbianas Feministas en los Discursos/Imágenes Públicas de los Feminismos, donde la Sexualidad Lesbiana importaba mucho menos que la Opción Política, y a la vez hermanaba a las Lesbianas Feministas/Feministas Lesbianas bajo la Categoría de “Mujeres que aman a las Mujeres”, siendo este amor un amor bastante genérico, bastante desexualizado, y donde la Identidad Primordial vinculante era/es la de Género “Mujer”.

Este boom hermanador de las Mujeres, a través del Lesbianismo “Político”, pinchó cuando la Sexualidad Lesbiana requirió sus Espacios/Discursos/Imágenes Públicas construidos desde la Sexualidad como Categoría/Institución de Poder, al entrar en fragante contradicción con los Discursos Contextuales de Género del momento (Rubin, 1984). Y en este pinchazo, el Discurso asexuado del “Continuo Lesbiano”, por un lado quedó fosilizado en el tiempo como aquello que piensan las Lesbianas Feministas/Feministas Lesbianas, mientras que por otro, en los Discursos/Imágenes Públicas de los Feminismos, se fue/va diluyendo hasta desaparecer de la mismísima Historia/Identidad de algunos Feminismos actuales, bajo el modernísimo concepto de Transversalidad. Pero… ¿Existen realmente Transversalidades de Políticas Lesbiano Feministas, o nos encontramos con Transversalidades de vidas Lesbianas que sustentan los Feminismos? ¿Nos conformaríamos con trabajar Transversalmente los Feminismos, o seguimos pensando que hacen falta Políticas Autónomas por parte de las Mujeres? Si defendemos la Autonomía de los Movimientos de Mujeres en términos de las Identidades de Género “Mujeres”… ¿Por que no nos adscribimos con el mismo ahínco a pelearnos por mantener los espacios Políticos Lesbiano Feministas en términos de las Identidades Sexuales “Lesbianas” en el contexto de los Feminismos? ¿Nos queda algo a las Lesbianas Feministas/Feministas Lesbianas que nos vincule a los Feminismos actuales, más allá del glorioso pasado del “Continuo Lesbiano”?


En el Estado Español, el Lesbianismo como Opción Política se produjo desde los Feminismos Radicales, mientras que el Lesbianismo como Opción Sexual se produjo desde los Feminismos Doblemilitantes (Feministas con actividades militantes más allá de los Movimientos de Mujeres, generalmente en Partidos Políticos), lo curioso es que en ambos casos, las Identidades Políticas Lesbianas Feministas/Feministas Lesbianas quedaron subyugadas/minimizadas bajo la dialógica Opción Sexual/Opción Política. De forma que la Opción Política sujetaba las Lesbianas a las Mujeres y la Opción Sexual, al formar grupos específicos de Lesbianas, desresponsabilizó a los Feminismos de la carga Sexual que sujetaba las Lesbianas a los Movimientos Gays. Una y otra Opción, evadieron asumir Identitariamente el Feminismo Lesbiano como algo colectivo, propio, publicable y exportable de/por los Feminismos, Política y Sexualmente coextensibles en las Lesbianas Feministas/Feministas Lesbianas. De forma que sin saber bien como, las Lesbianas Feministas, hemos sido barridas del Feminismo hacia los Exteriores languideciendo en un mar de quienes somos/de donde venimos/a donde vamos mientras preguntamos: ¿Queda algo Lesbiano en las Políticas Feministas actuales que sea vivido como propio, como parte integrante de los Feminismos, y no como Tema Solidario con las Lesbianas de “fuera” (GLBTIQ)? ¿Siguen haciendo falta Espacios Lesbianos Feministas? ¿Tenemos las Lesbianas Feministas/Feministas Lesbianas voz propia en los Feminismos? Y si la tenemos… ¿Qué alcance tienen nuestras Propuestas/Discursos? ¿Tenemos Propuestas/Discursos que vayan más allá de la llamada al reconocimiento y expresión pública por parte de los Feminismos en sus Políticas/Imágenes/Acciones? ¿Sabemos las Lesbianas Feministas/Feministas Lesbianas hacer Políticas Lesbianas que vayan más allá de las que se gestan y recrean en los bares?


AQUÍ Y AHORA

En una de estas reuniones de después… donde todas las presentes buscábamos los porqués del sentimiento de orfandad generalizada de las Lesbianas Feministas/Feministas Lesbianas, un argumento aparentemente convincente fue/es que el nuevo estatus de Legalidad/Ciudadanía no ponía fácil abogar por las Lesbianas, por lo menos no tan fácil como lo es abogar por el aborto en la actualidad, o por el maltrato… Este argumento parte de la utilidad de tener elementos “Feministas”, tangibles, para hacer campaña y llamar a la movilización, pero lo que aquí se propone no es que los Feminismos se pongan a hacer Campaña de los Lesbianismos (que no estaría mal), si no que sean conscientes de sus propios Cuerpos Lesbianos, sus propias Historias/Genealogías/Genéticas Lesbianas, y que sean capaces de mostrarlas sin recatos, y con orgullos. Es decir, a mi entender, hace falta seguir interrogando, desde los Feminismos, a los Feminismos por su manifiesta Lesbofobia, hace falta hacerlo entre/desde/para todas las Identidades Políticas Feministas, sean estas Lesbianas, o no. Hace falta sacar las Políticas Lesbianas de los Bares (sin menospreciar estos lugares) y llevarlas a los centros Oficiales/Formales de los Discursos/Imágenes Feministas. Hace falta ponernos a pensar para situarnos Política y Discursivamente, como Lesbianas Feministas/Feministas Lesbianas, en el mapa actual de los Feminismos, de los GLTBIQ. Hace falta hablar con voz propia y reescribir Historias/Genealogías/Ontologías, donde las Lesbianas Feministas/Feministas Lesbianas aparezcamos como protagonistas directas de Hechos/Debates que hasta ahora se han atribuido, asépticamente, a los “Feminismos”.

Lesbianismos y Feminismos son Movimientos Sociales Históricamente Independientes, que a la vez son Interdependientes mediante Identidades Políticas que Interseccionan: Feministas Lesbianas/Lesbianas Feministas. En este sentido, estas Identidades Políticas tienen un valor vertebrador de las miradas/vivencias de dos Categorías de Análisis/Instituciones de Poderes diferenciadas: Géneros y Sexualidades, que pueden exportarse tanto a los Feminismos como a los Lesbianismos. Es decir, podemos proponer a los Feminismos que impliquen en los Análisis/Discursos/Imágenes a las Sexualidades, y podemos proponer a los Lesbianismos que impliquen en los Análisis/Discursos/Imágenes a los Géneros, pero, esta Identidad bisagrada, tiene que hacer algo más que proponer hacia “las otras”,hace falta recentrarse Históricamente y analizar los porqués de los fracasos de tales proposiciones, a una y otra banda de los Feminismos/Lesbianismos.

Cuestionar la Normatividad Heterosexual, es algo mucho más que una cuestión de gustos, forma parte, de ese Biopoder que se ejerce sobre aquellos cuerpos que se Normativizan en clave de Sexualidad y sobre aquellos que “teóricamente” se dejan de Normativizar, y sin embargo, existen muchas confusiones, y desde hace mucho tiempo, sobre qué se cuestiona de la Heterosexualidad: “Atacar la Heterosexualidad hace poco por reforzar la autoconcepción de masas de mujeres que desean estar con hombres” (hooks, 1981:191). Esta apelación a sintonizar con las “masas” de Mujeres, sintoniza con el argumento de las “Campañas” y sitúa la crítica proveniente de las Lesbianas Feministas/Feministas Lesbianas en algo de reducido alcance Feminista, algo minoritario/parcial, frente a la generalidad de los Feminismos. Esta minimización de las propuestas de los Feminismos Lesbianos en aras a las masas de mujeres a las que los Feminismos tienen que movilizar, parece que parte de una concepción viciada en la que los Feminismos son considerados como Movimientos Sociales Generales y los Lesbianismos son considerados como movimientos sociales Minoritarios, cuando ambas, son dos Identidades Políticas Diferentes, construidas en función de los Géneros (Feminismos) y las Sexualidades (Lesbianismos), y ambas, tienen la Capacidad Genérica de Interrogar a las masas de Mujeres sobre los elementos que construyen/reconstruyen/deconstruyen las Redes/Relaciones de Poderes que les dan entidad. Cuestionar las Normatividades Sexuales, es algo que los Feminismos tienen pendiente de hacer, centrando los Debates desde sus propias carnes Lesbianas, dejando de poner Distancias que proporcionan los referentes GLTBIQ, mientras que los Feminismos Lesbianos tienen pendiente de hacer actos de concentración, análisis y balance situacional que expliquen la actual situación de las Lesbianas Feministas/Feministas Lesbianas, y permitan trabajar con perspectivas de futuro más productivas para todas, pues, parece que sólo se ha escrito/historiografiado/narrado los sucesos de las Lesbianas Feministas en relación con los Feminismos hasta épocas recientes, en las que desaparecen de los Feminismos para aparecer en los GLBTIQ (Platero, 2008). Quizás nos toque, una vez más, a las Lesbianas Feministas, escribir/historiografiar/narrar pero sobre todo Debatir, dónde estamos en estas épocas recientes, en las que la Invisibilidad nos da por difuntas… Y no estamos muertas que, sólo estamos, de parranda…. ¿O no?


© Bàrbara Ramajo Garcia
Fuente: http://www.feministas.org/IMG/pdf/Identidades_Barbara_Ramajo.pdf

Comments

Popular Posts