Campaña contra la droga en Nueva York: picaeros
El alcalde de Nueva York ha tenido la genial idea de habilitar picaeros donde los drogadictos puedan pincharse a gusto alejados de miradas indiscretas. Es decir, debajo de un puente o en solares molestan y van a acondicionarles cinco locales en zonas de Manhattan, Brooklyn y el Bronx para que se pinchen.
Es de momento sólo una propuesta que están vendiendo como la panacea para alejar a los usuarios de drogas (qué modeLnos) de parques, restaurantes de comida rápida y otros lugares públicos. No sé quién ha tenido la genial idea, pero ¿y los vecinos? ¿y las familias que vivan en esa zona? Pagando el dineral que se paga aquí por un alquiler, a mí no me haría ni puta gracia vivir cerca de un picaero. Bastante tenemos ya con verlos por la calle y hasta en el metro, para que encima ahora te los metan en tu edificio o en tu calle y no puedas hacer nada.
Yo me acuerdo de que en Córdoba en los años 80 y 90 había una crisis tremenda de drogas y había zonas por donde no se podía pasar por las jeringuillas y los drogatas. No te hablo de zonas conflictivas o barrios chungos sino de parques como Colón y Los Patos en pleno centro de la ciudad. En mi edificio había limoneros y hasta que no se reforzaron los muros y no se cerró el acceso con una cancela no se podían coger los limones porque los usaban para limpiar las jeringuillas o preparar droga (no sé cómo iría el tema). Aquí se les van a llenar las zonas donde estén los picaeros de drogatas y camellos. Obviamente la droga no la van a dar gratis ni el personal que trabaje en los picaeros ni los camellos, luego el crimen va a subir en esas zonas.
De aprobarse la propuesta y funcionar se extendería al resto de Manhattan. Lo están vendiendo como un modelo que funciona muy bien en otros países, pero sin decir exactamente los países o las ciudades donde funciona tan bien. Por lo que me cuentan en España no hay este tipo de locales. En Madrid hay narcopisos no oficiales ocupados por camellos donde van a pincharse lo que puedan y no están en medio de la calle. El negocio es para el camello. Los vecinos están hasta el gorro. El que puede se muda a otra zona y los pisos que dejan atrás, que no los pueden vender o alquilar fácilmente precisamente por tener cerca un narcopisos, los okupan. La Carmena como si no fuera con ella y en Barcelona lo mismo.
Es de momento sólo una propuesta que están vendiendo como la panacea para alejar a los usuarios de drogas (qué modeLnos) de parques, restaurantes de comida rápida y otros lugares públicos. No sé quién ha tenido la genial idea, pero ¿y los vecinos? ¿y las familias que vivan en esa zona? Pagando el dineral que se paga aquí por un alquiler, a mí no me haría ni puta gracia vivir cerca de un picaero. Bastante tenemos ya con verlos por la calle y hasta en el metro, para que encima ahora te los metan en tu edificio o en tu calle y no puedas hacer nada.
Yo me acuerdo de que en Córdoba en los años 80 y 90 había una crisis tremenda de drogas y había zonas por donde no se podía pasar por las jeringuillas y los drogatas. No te hablo de zonas conflictivas o barrios chungos sino de parques como Colón y Los Patos en pleno centro de la ciudad. En mi edificio había limoneros y hasta que no se reforzaron los muros y no se cerró el acceso con una cancela no se podían coger los limones porque los usaban para limpiar las jeringuillas o preparar droga (no sé cómo iría el tema). Aquí se les van a llenar las zonas donde estén los picaeros de drogatas y camellos. Obviamente la droga no la van a dar gratis ni el personal que trabaje en los picaeros ni los camellos, luego el crimen va a subir en esas zonas.
De aprobarse la propuesta y funcionar se extendería al resto de Manhattan. Lo están vendiendo como un modelo que funciona muy bien en otros países, pero sin decir exactamente los países o las ciudades donde funciona tan bien. Por lo que me cuentan en España no hay este tipo de locales. En Madrid hay narcopisos no oficiales ocupados por camellos donde van a pincharse lo que puedan y no están en medio de la calle. El negocio es para el camello. Los vecinos están hasta el gorro. El que puede se muda a otra zona y los pisos que dejan atrás, que no los pueden vender o alquilar fácilmente precisamente por tener cerca un narcopisos, los okupan. La Carmena como si no fuera con ella y en Barcelona lo mismo.
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