Sigo en mis trece

Me cuenta una amiga que lo de los contenedores morados empezó en Alcalá de Henares en marzo así que los de Leganés sólo han sido meros copycats. ¿Mi respuesta? Sigo en mis trece: me siguen pareciendo igual de gilipollas.

Primero los de Ecovidrio por aprovecharse de la marea morada y/o movimiento feminista para vender y tener publicidad “de gratis” en medios locales (*). ¿Me vais a decir que es coincidencia que unos contenedores los presenten en marzo (Día de la Mujer) y otros en noviembre (Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres)?

Y segundo los de los respectivos ayuntamientos por aprovechar días de la mujer variados para colgarse la medalla de modeLnos y lo que ya dije el otro día: no tener ni en el departamento de la mujer ni en el de marketing ni en el de cultura ni en todo el ayuntamiento una persona con dos dedos de frente que no vea relación entre contenedores y violencia de género y no lo vea como un claro ejemplo de micromachismo.

¿Qué dedicar una calle, un edificio o un parque a estas mujeres es muy aburrido? Pues hay otras veinte mil formas de homenajearlas dentro de espacios urbanos: pintar bancos o fuentes, dedicarles murales, montar una exposición tradicional u online, dedicar lo que se hayan gastado en contenedores de vidrio morados a clases o talleres para niñas y mujeres de todas las edades, ciclos literarios y/o de cine, etcétera, etcétera, etcétera.

(*) soy consciente de que yo también se la estoy haciendo con estos posts

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